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1.3.11

La interrupción de la circulación energética como disparador de enfermedades

Muchas personas sienten dolor o incomodidad sin saber que tipo de dolencia han contraído. Frecuentemente sufren de dolores de cabeza, de hombros o de espalda relacionados con la columna. ¿Cuál es la causa de estos problemas? Los mismos son causados básicamente por la interrupción en la circulación de la energía del cuerpo (Qi).

Cuando un desorden de Qi sucede en el cuerpo, diversas situaciones pueden desarrollarse. Los canales energéticos (meridianos) se bloquean y estos bloqueos causan dolor.

Los antiguos libros de medicina china dicen que “todas las enfermedades son causadas por un desorden del Qi”. Algunos factores externos que intervienen son, por ejemplo, la gripe y otras epidemias. Los factores internos son la reducción o extenuación del Qi.

El desorden de la energía se encuentra generalmente donde está el problema a nivel físico. Estos desórdenes se pueden dividir en tres categorías: deficiencia de energía, obstrucción del canal o inversión de la circulación.

Las enfermedades prolongadas, el envejecimiento prematuro y la fatiga extrema llevan a una deficiencia de energía. Algunos ejemplos de los síntomas relacionados con este desorden son:  debilidad generalizada, respiración corta y débil, voz apagada, falta de apetito, desordenes digestivos, vesícula biliar débil y susceptibilidad a enfermedades infecciosas.

La energía que se bloquea dentro del cuerpo puede compararse con un embotellamiento de tráfico. Cuando esto ocurre, en algún punto de los meridianos la energía se queda quieta y se congestiona, se interrumpen las funciones de los órganos y la energía de estos se estanca. Este estado generalmente se ve reflejado en los siguientes síntomas: dolor de hombros y espalda, abdomen hinchado por el exceso de energía estancada y pecho adolorido y seco.

Cuando la energía circula en la dirección opuesta a lo normal, se considera que es un desorden de circulación del Qi. Esta condición se asocia generalmente con los pulmones y el estomago. Los síntomas incluyen tos, asma, nauseas, vómitos e hipertensión.

La práctica de qigong tiene el objetivo de fortalecer la energía del cuerpo para que la misma sea poderosa y vibrante. Cuando esta fuerza poderosa fluye a través de los meridianos, logra la ignición de la energía estancada y la corrección de la energía revelada. A su vez, provee a todo el cuerpo de Qi positivo. Si se logra corregir estos tres desordenes será posible prevenir todo tipo de dolencia.

Deficiencia de Energía à Fortalecimiento
Obstrucción de meridianos à Desbloqueo – Ignición.
Inversión de la circulación à Limpiar – Encaminar.



Extracto del libro: “Qigong Energy Healing” by Master Gao Yun & Master Bai Yin – Lotus Press - ISBN 978-0914955696

Tai Chi del Parque – Instructora Marcela Thesz – Córdoba, Argentina.